Te quiero así como eres y me aguantas así como soy, celosa y caprichosa, sin olvidar mi falta de paciencia y mi mal carácter.
Estoy feliz, y todo gracias a ti.
Aún sonrío cuando te veo y mis nervios se ponen a flor de piel... así que todo está más que bien.

No hay comentarios:
Publicar un comentario